El hombre, no solo posee un
lenguaje natural como la escritura o el habla, sino posee la particularidad de
poder expresarse gráficamente y si se especializa en determinadas expresiones factibles
de ser materializadas puede alcanzar a desarrollar otros lenguajes más
específicos como puede considerarse: la pintura, la escultura, el cine, la
música, el video, el teatro, el diseño gráfico, la arquitectura, la industria en sus diferentes desarrollos, por mencionar
algunas expresiones lingüísticas posibles de ser concretadas.
Tomando esta concepción de 3
dimensiones de lenguajes de Jorge Sainz
(El dibujo de arquitectura: teoría e historia de un lenguaje gráfico). Puede
entenderse la vincularidad del dibujo como expresión multidimensional, factible
de estar interrelacionando diversos lenguajes de expresión mayores, como se
daba ya en el Renacimiento, cuando a través del dibujo la mente moderna
modelaba, la escultura, la arquitectura o la pintura, como artes “mayores” y a
través del cual el dibujo hacía de
soporte.
Por otro lado nos permite
establecer relaciones entre el autor, su contexto y la obra. Por lo que no podríamos
entender la arquitectura del Renacimiento sin el proyecto el artista y su
relación con la ideación del espacio en perspectiva.
